#PildoraDeProtocolo: Ramadán
En esta semana que finaliza el Ramadán, hemos pedido a nuestra alumna Lina Jirari que nos hablase un poco de su cultura y de alguna de las tradiciones que se llevan a cabo durante este mes tan importante para los musulmanes.
«Este año, el Ramadán empezó el 12 de abril y terminará el 12 de mayo.
Las fechas de este mes no son fijas, ya que se sigue el mes lunar. Su duración es de 29 a 30 días, desde la luna creciente hasta la próxima luna creciente.
El Ramadán, mes sagrado para los musulmanes, es un mes de ayuno, oración y reflexión. Durante este mes los musulmanes deben seguir un protocolo de conducta, religioso y alimentario.
Comportamiento: el que ayuna, no debe hacer/ hablar de los demás, debe ayudar a los necesitados, en la medida de lo posible, ya sea mediante dinero o comida, y centrarse en si mismo para lograr un estado de paz.
Religión : durante este mes, los musulmanes aprovechan para rezar todo lo que puedan, superando las 5 oraciones diarias, e intentan terminar la lectura del Coran entero a lo largo de este mes. Sobre todo durante la noche.
Alimentación : durante este mes los musulmanes deben ayunar desde el amanecer hasta el atardecer. Teniendo la libertad de comer y beber durante este periodo de tiempo (atardecer – amanecer).
Cada país tiene sus propias tradiciones refiriéndose a la comida.
De manera general para romper el ayuno (ftour), se empieza con un vaso de agua y dátiles, seguidos de una sopa acompañada de huevos duros y dulces tradicionales. Tras ello la cena una o dos horas después. Y finalmente unas horas antes del amanecer (sohor), que se puede comparar con un buen desayuno consistente para ayudar el cuerpo a soportar el día de ayuno. La hidratación es también muy importante, ya que no se permite beber durante el día, por lo cual estas comidas están acompañados de bebidas como agua, zumos, thé, leche…
Por ejemplo en Marruecos, al igual que en otros países se empieza con el agua y los dátiles, seguidos de la ‘‘harira’’, sopa tradicional hecha con garbanzos, tomate, cebolla, trozos de carne, cilantro, arroz , lentejas y especias, además de dulces tradicionales, mayoritariamente compuestos de almendras, miel y sésamo. También, se suele poner en la mesa una crepes tradicionales acompañadas de una salsa de mantequilla y miel.
Para la cena, se suelen servir platos de carne, pollo o pescado, acompañados de diversas ensaladas.
Después de la cena, se suele juntar con la familia y disfrutar de thé con hierbabuena, bebida tradicional favorita, y unos dulces tradicionales.»
Escrito por Lina Jirari, alumna del 2º curso de Diplomado de Organización de eventos, Protocolo y RRII.