#PÍLDORASDEPROTOCOLO: “EL BUEN HACER Y LA COMPOSTURA AL CONVERSAR EN UN EVENTO SOCIAL” POR CAROLINA AMATE
Por Carolina Amate Villanueva (Miembro del Staff de la Escuela Internacional de Protocolo de Granada) / Todas las personas compartimos una serie de reglas sobre cómo debe ser el comportamiento en sociedad. Estas normas de protocolo social (también llamadas de cortesía, buenos modales, decoro, etc.) se han establecido para facilitar las relaciones entre las personas. Su desconocimiento, o falta de aplicación deliberada, en sociedad, puede denotar falta de educación y ser causante de situaciones embarazosas y sonrojantes para uno mismo y/o para el resto de personas participantes en un acto o evento.
En este breve “post” vamos a hacer una somera aproximación a cómo hay que comportarse en un evento social para dejar una impresión positiva en el resto de asistentes y, de paso, contribuir a que el clima general del encuentro esté marcado por la cordialidad, la empatía y la cercanía.
En la parte más informal de un evento, por ejemplo, una comida, cena o cóctel, ¿debo hablar? ¿debo tomar la iniciativa para empezar una conversación? ¿”calladita” o “calladito” estoy más “guapo/a”? Recuerda, ¡estás en un evento social! Deja tu incomodidad y tus miedos en la puerta y sé partícipe del mismo…disfruta y enriquécete…conversa y practica la escucha activa de forma bidireccional. Elude los temas de conversación que puedan llevar a una discusión acalorada, como política, guerra, sexo, religión, dinero…no es el sitio ni el lugar adecuados para ser un/a “quema sangres”.
Aunque nadie pueda cuestionar tus convicciones, tus principios o tu conciencia social, salvo que el tema del evento esté orientado a ello, no hables de “dramas lacrimógenos”, ni de las grandes tragedias que afectan al mundo… pues corres el riesgo de hacer que a los demás se les “indigesten” los manjares gastronómicos servidos en el evento. Evita que la negatividad sea el hilo conductor de tu conversación; si tienes que ofrecer un punto de vista diferente sobre un tema, hazlo de forma constructiva, moderada y evitando que tu interlocutor pueda ver un ataque personal o una crítica feroz en tu opinión discordante.
Sé amable, hay muchos temas interesantes sobre los que conversar: el último libro publicado de “tal”, la última película protagonizada por “tal”, viajes, tendencias de moda, gustos musicales, vacaciones, etc. Y dentro de esta amabilidad y mesura, no olvides hacer preguntas interesantes y asertivas para conocer mejor a tus interlocutores y establecer así un clima de confianza. Si hay reciprocidad, y también te hacen preguntas a ti, eso es una buena señal, ya que la bidireccionalidad es lo que debe primar en una buena conversación. Si se trata de un evento sentado, tipo cena o comida, una buena práctica para formentar la conversación por parte de los oganizadores, consiste en separar a las parejas de acompañantes y alternar hombres y mujeres en la mesa.
Y una reflexión final, sin cuestionar que la igualdad de género es un derecho irrenunciable por el que tenemos que seguir luchando tanto mujeres como hombres, tampoco debemos renunciar a la CORTESÍA… no deben perderse detalles tradicionales que son signos de buenos modales y una educación exquisita, como que los hombres retiren lentamente la silla de su acompañante femenino para que se siente; servir el vino a los demás y dar a probar primero los platos al acompañante; ayudar a la acompañante a ponerse o quitarse el abrigo; abrir la puerta para facilitar la salida o la entrada a una estancia al resto de acompañantes… ¡son pequeños gestos de cortesía que transmiten cosas positivas y que humanizan los eventos sociales!