Sabías que……. La dinastía de los Trastámara, a la que  pertenecía la reina Isabel la Católica, eran la rama bastarda de la familia. Esta dinastía fue creada por su tatarabuelo Enrique de Trastámara, tras asesinar a su medio-hermano Pedro I el Cruel (Heredero legítimo de la dinastía de Borgoña, que era la que debía heredar el trono).

La Casa de Trastámara era una rama menor de la Casa de Borgoña, a la que acabarían sustituyendo. La Casa de los Trastámara toma su nombre del Condado de Trastámara (nombre que proviene del latín Tras Tamarís –más allá del río Tambre-, que se encuentra en el noroeste de Galicia. Se trata pues de una casa noble, originaria del norte de Galicia y que se asentaría como dinastía real de las Coronas de Castilla, Aragón, Navarra y Nápoles.

Alfonso XI de Castilla le concedió el condado a uno de sus hijos ilegítimos y favoritos, Enrique, que años más tarde se enfrentó con su hermanastro, Pedro I, en la famosa guerra civil entre hermanos, que ganó con la ayuda del mercenario francés Dugesclín.

Enrique, que subió al trono como Enrique II, el de las Mercedes (1367-1379), tuvo que guerrear contra fuerzas extranjeras y nacionales, negociar y pactar mucho con sus nobles para mantenerse en el trono.

Lo sucedió su hijo Juan I (1379-1390) que tuvo bastantes problemas con Portugal y creó el título de Príncipe de Asturias.

Con Enrique III, el Doliente (1390-1406) se comenzó a colonizar las Islas Canarias y se continuó con la conquista de Granada, donde murió.